En los últimos años, la psicología online ha ganado gran popularidad. En parte, debido a la globalización digital, cogió un gran impulso a raíz de la pandemia del COVID-19. Sin embargo, hay quienes todavía cuestionan la efectividad de las terapias no presenciales. Hoy, desde Caban Online, analizamos si los psicólogos online son o no efectivos.
Psicólogos online, ¿son efectivos?
La terapia online es un tipo de terapia psicológica que se realiza a través de internet. Los pacientes pueden comunicarse con su terapeuta a través de videollamadas, chat o incluso correo electrónico.
En cuanto a las sesiones de terapia online, suelen ser similares a las sesiones presenciales. El psicólogo y el paciente se reúnen en una plataforma segura y confidencial para hablar sobre determinadas cuestiones y trabajar en estrategias para superarlas.
Ventajas de las terapias online
Una de las ventajas que proporcionan los psicólogos online es la accesibilidad. Así, es un gran apoyo para personas que viven en zonas rurales, alejadas de consultas presenciales, o que tienen dificultades para desplazarse hasta una.
En este sentido, las sesiones pueden realizarse desde el hogar del paciente, lo que proporciona la comodidad y tranquilidad de un entorno seguro para él. Por otro lado, quienes prefieren mantener en secreto sus terapias, pueden acceder a una consulta discreta y privada.
Al mismo tiempo, los horarios y programación de las sesiones online pueden ser más flexibles que en las celebradas presencialmente.
También son perfectas para aquellos que cuentan con muy poco tiempo libre y agendas muy apretadas. Esto les permite no renunciar a su terapia mientras siguen realizando todas sus actividades diarias.
Así mismo, las consultas online facilitan la continuidad del tratamiento para personas que cambian constantemente de residencia, o cuando surgen imprevistos que impiden realizar consultas presenciales.
Finalmente, algunas personas pueden sentirse más cómodas hablando con los psicólogos online que en persona.
Posibles adversidades
Si bien cada vez contamos con conexiones a Internet más rápidas y estables, todavía hay regiones que no tienen ese privilegio. Una mala conexión o carecer de equipos suficientemente potentes, puede comprometer la calidad de las comunicaciones.
A la vez, determinados pacientes pueden presentar falta de compromiso a la hora de asistir a sus terapias online. Se necesita determinación y disciplina para evitar distracciones y el abandono de las sesiones.
Finalmente, solo el profesional de la salud mental puede determinar si el caso tratado es apto para sesiones online, o requiere de visitas presenciales para una supervisión más exhaustiva.
En resumen, la terapia online puede ser tan efectiva como la terapia presencial, ofreciendo una mayor flexibilidad horaria y la comodidad de poder realizar las sesiones desde cualquier lugar.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que la aplicación de la terapia online no es recomendable en todos los casos, y que es importante que el psicólogo y el paciente consensuen la idoneidad de elegir la modalidad presencial o la terapia online.