EMDR es un abordaje psicoterapéutico interesante y complejo que incorpora mucha de la sabiduría de otras terapias. Veremos, a lo largo de este artículo las 8 fases del tratamiento EMDR.

Aunque la mayoría de la gente lo asocia con los movimientos oculares, la verdad es que EMDR es una forma acelerada de procesamiento de la información que incluye una secuencia de ocho fases y numerosos elementos procedimentales que contribuyen a su éxito.

El EMDR se enmarca dentro de un plan de tratamiento integral para promover tu recuperación.

Las ocho fases del tratamiento son necesarias para asegurar que se manejan adecuadamente todos los elementos disfuncionales del problema. Por eso cada una de las fases se considera importante y esencial para poder completar con éxito el tratamiento con EMDR.

Un breve resumen de las ocho fases te ayudará a entender la función de cada una de ellas y cómo puedes apoyar tu propio progreso.

Fase 1: Historia Clínica

Durante la fase 1, la historia clínica, te he preguntado sobre tu problema, familia, escuela, profesión, desarrollo e historial médico, psicológico y físico. La idea es conocerte para (con tu ayuda) poder tomar la mejor decisión sobre cómo comenzar tu proceso de recuperación. Buscamos los distintos traumas T y t.

Preguntas, del estilo ¿sucedió algo importante un tiempo antes del síntoma?/ ¿cuándo me he sentido así antes?/ ¿Y esto, de dónde viene?/ ¿dónde aprendí esto? nos servirán para comprender el desarrollo específico de tu problema, y poder establecer la jerarquización (con mucha frecuencia es cronológica) de los recuerdos en función del objetivo que nos hayamos marcado. Una vez completada esta fase, trazaremos un plan de tratamiento juntos. ¡Importante! Por favor, déjame saber si hay algo importante que no te haya preguntado.

Fase 2: Preparación

La fase 2 es la fase de preparación y probablemente sea la fase más importante de tu tratamiento. Te prepara para asegurarte de que tienes los recursos para abordar el problema.

Cuando hablamos de recursos nos referimos a estrategias de afrontamiento. Los recursos son las maneras en las que nos calmamos a nosotros mismos y manejamos pensamientos, sentimientos y sensaciones corporales perturbadoras.

Esta fase es crucial para una buena resolución y puede durar desde una sesión a tantas como sean necesarias para asegurarnos de que puedas manejar cualquier cosa que surja. Es como si te estuvieras preparando para el invierno y así, cuando llegue la tormenta, no será un problema porque estarás listo.

Durante esta fase se introducen los procedimientos concretos del EMDR para que te vayas familiarizando con ellos y puedas hacer tantas preguntas como quieras. El reprocesamiento con EMDR no comenzará hasta que tú y yo estemos seguros de que estás listo.

Fase 3: Evaluación

Aclararemos el problema sobre el que vamos a trabajar, escogiendo los siguientes elementos: la imagen que lo representa, o que te hace pensar negativamente sobre ti mismo ahora (creencia negativa), cómo desearías verte a ti mismo referente a esa situación ahora (creencia positiva), tus emociones y dónde se localizan las sensaciones en tu cuerpo.

Te enseñaré a medir las emociones y la creencia positiva sobre ti mismo para que podamos ver juntos donde te encuentras en el proceso de cambiar tus pensamientos y sentimientos sobre ti mismo y la situación.

Fase 4: Desensibilización

En esta fase usaremos estimulación bilateral para resolver el problema planteado y cualquier material relacionado. Cuando el evento escogido como diana y la información existente en los canales asociados hayan sido reprocesados, pasaremos a la siguiente fase.

Sabremos cuando continuar gracias a dos escalas: la escala de unidades subjetivas de perturbación (SUD) y la escala de validez de la creencia (VOC). La SUD nos ayuda a medir tu nivel de perturbación o incomodidad con tu problema y la VOC nos ayuda a evaluar cuán cerca estás de tu objetivo. Cuando la SUD llega a 0 y la VOC a 7, sabremos que estás listo para pasar a la siguiente fase. Algunas veces esta fase avanza rápido y otras más lentamente. Esto depende de lo que necesites para resolver la dificultad.

Es en esta fase cuando tu cerebro comienza a reprocesar el trauma, y lo hace solito, y siempre bien. Sólo tendrás que observar lo que te viene a la cabeza, ya sean recuerdos, imágenes, pensamientos, reflexiones, emociones, sensaciones físicas… Iremos haciendo pausas en las que te pediré un poco de información mediante la pregunta “¿qué te viene?”, y después simplemente seguirás observando lo que aparezca.

Una forma fácil de entender esta fase es explicarla así: imagina que estás en un cine, en la pantalla aparece la imagen, y tiene un subtítulo “[creencia negativa]”, nota como esto te hace sentir y dónde lo sientes, y simplemente observa la película que aparece, sin juzgar, ni evitar, ni controlar nada, solo observa y siente, como si vieras una película.

La forma en que cada persona realiza esta fase es diferente, puede que la imagen no cambie y sea siempre la misma. Puede que la imagen cambie, se haga de blanco y negro o de otros colores, que se haga más grande, más pequeña, etc. Puede que la imagen cambie a otra imagen parecida pero que no sucedió. Puede que pase una película mental de todo lo que ocurrió, o de su vida. Puede que salte a distintos momentos de su vida. Puede que no aparezcan imágenes y lo vivas todo a nivel emocional, o físico.

Suceda como suceda, recuerda que es exactamente la forma en que tiene que ser. Tu cerebro lo hará bien.

Es posible que tengas reacciones emocionales y/o físicas muy fuertes e intensas. Suele ser un signo de procesamiento. No te asustes.

Si lo necesitas podemos hacer una pausa. Mi recomendación es seguir con la estimulación bilateral hasta que esta reacción pase o sea más suave.

Imagina que estamos en un túnel negro, conduciendo; si pisamos el freno en medio del túnel, todo será negro alrededor; lo mejor es mantener el pie en el acelerador hasta salir del túnel.

Recuerda que todo lo que aparece es material antiguo grabado en tus redes neuronales que se está reprocesando. Estás en un entorno seguro.

Que no tengas este tipo de reacción intensa no quiere decir que no estés reprocesando. Simplemente sucede que no está guardado así en su cerebro.

Fase 5: Instalación

Esta es una de fases del tratamiento EMDR donde conectamos tu creencia positiva/recurso con lo que quede del problema pasado a fin de que el recurso positivo enlace con el antiguo problema.

Fase 6: Examen Corporal

En la fase 6 o examen corporal, tenemos la oportunidad de observar si aún queda algún malestar en alguna parte de tu cuerpo. Este examen corporal es otra forma de asegurarnos de que todo el material relacionado con el problema ha sido completamente resuelto.

En EMDR compruebo constantemente los distintos niveles para ver si esto ocurre. Es importante reprocesar todo el material relacionado con el problema para poder ayudarte a dejarlo atrás.

Así, podrás incorporar lo aprendido sobre el tema a tu base personal de conocimientos.

Fase 7: Cierre

Juntos, haremos un cierre formal de la sesión usando uno de tus recursos. Me interesa asegurarme de que te sientas bien antes de irte.

Si tienes algún malestar o te sientes desconectado de ti mismo y/o no estás seguro de lo que te está pasando, quiero saberlo para poder ayudarte a sentir mejor, o al menos a que estés conectado en el momento presente, antes de irte de la consulta.

Es importante que sepas que al comenzar EMDR abres una puerta al procesamiento del material en el que has estado trabajando.

Teniendo esto en cuenta, te pediré que anotes cualquier cambio interesante o inusual que ocurra en cualquier área de tu vida entre sesiones. Por ejemplo, ¿estás actuando de manera diferente frente al problema o sus disparadores? ¿Ha mejorado tu estado emocional? ¿Te estás involucrando en conductas nuevas o distintas a las que estás acostumbrado? A veces, sentirás como si regresaras al viejo problema. Pero esto no es razón para alarmante ya que es parte del procesamiento del problema que estás resolviendo.

Si tienes cualquier preocupación, o si te sientes muy perturbado por lo que te viene a la mente durante este tiempo, por favor llámame y déjamelo saber para poderte ayudar. No estás solo en este proceso.

Fase 8: Reevaluación

La última de las fases del tratamiento EMDR ocurre durante la sesión siguiente a la sesión de EMDR. Esta fase se llama reevaluación. En ella repasaremos la información que has recabado entre sesiones para ver si ha surgido algo nuevo sobre lo que necesitemos trabajar.

El EMDR es una herramienta excelente para disipar todo el malestar relacionado con el problema sobre el que estamos trabajando.

Ahora bien, ¿Qué efectos secundarios produce una sesión de EMDR? Es bastante común sentirse cansado después de una sesión de reprocesamiento, incluso sentir la cabeza como si se hubiera estudiado durante muchas horas. Otras personas no notan nada en especial, y otras se sienten muy bien, ligeras, liberadas.

El reprocesamiento, como se indica en la fase del cierre, no se detiene por dejar de realizar la estimulación bilateral, y puede continuar una vez abandonada la consulta, de forma más lenta. También puede que por la noche duermas muy bien, o que te vengan muchas imágenes… cada persona es distinta. Puede que te vengan imágenes o recuerdos, emociones o sensaciones físicas.

Recuerda que no tienen que ver con nada que esté ocurriendo en el presente. Es material antiguo. Si te viene algún recuerdo que consideres importante, anótalo. Si hasta la próxima sesión notas emociones o sensaciones físicas o pensamientos muy perturbadores, fíjate en cuál es el detonador, y anota todo esto.

Este material lo traerás a la consulta, y nos servirá para realizar un trabajo aún mejor.

Los efectos de esta terapia son inmediatos. Los cambios que notes desde que finalice la sesión se deberán al reprocesamiento del trauma trabajado. Estos cambios se van haciendo más profundos y generalizados a medida que nos alejamos en el tiempo.

Muchas veces ni siquiera te darás cuenta de algunos de estos cambios hasta que yo te pregunte por ellos. Hay pacientes que responsabilizan a otras causas estos cambios. Sea como fuere, verás cómo al hacer este tratamiento, mejoran los síntomas.

Muchas personas llegan a este tipo de terapia pensando que su malestar, su problema, se superará en muy pocas sesiones. Esto no siempre es así.

Si tu problema es el estrés postraumático por un hecho puntual, lo más probable es que necesites muy pocas sesiones.

Si tu problema es un duelo, también iremos rápido, siempre y cuando no tengas otros problemas emocionales.

Si tienes depresión el tratamiento es más lento, ya que tu situación no se deberá seguramente a un único hecho, y nos tendremos que fijar con seguridad en tu infancia.

No puedo decirte a priori cuantas sesiones necesitaremos. Hay personas con problemas muy graves que mejoran muy rápidamente, mientras otras lo hacen con lentitud.

¿Tienes alguna duda sobre las fases del tratamiento EMDR?, siéntete libre de preguntarnos en el blog y así podremos crear un artículo dedicado.

Firmado: Arwen Caban

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